Los maratonistas aprenden a regular el paso para no agotarse en los primeros kilómetros de la carrera. De la misma manera, las parejas debieran ser sabias al ver la relación como de largo alcance y así poner a los problemas y las diferencias en la perspectiva de un cuadro mayor.
Por último, los maratonistas, a excepción de unos pocos que encabezan el torneo, corren para mejorar sus propios tiempos. Corren para terminar la carrera y tratan de hacer su esfuerzo. La competencia puede arruinar una relación. Lo mejor que cada uno puede hacer es procurar dar lo mejor de sí y esforzarse por lograr que la relación sea lo mejor posible.
La vida de casados es un maratón. No basta con un gran comienzo para un matrimonio duradero. Se necesita determinación.
*!*"*"*!*"*"* EnTrE M@riPoS@s *!*!*"*!**"
Buen dia :D
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